El impacto de las metodologías activas en el desarrollo de la inteligencia emocional y la motivación en estudiantes de Formación Profesional: una revisión sistemática

Abstract

La educación técnica ha experimentado una gran evolución, aumentando progresivamente el número de alumno que la eligen frente a la formación académica, lo que ha llevado a una mayor demanda de metodologías de enseñanza más dinámicas y efectivas. En este contexto, las metodologías activas se han consolidado como una alternativa a los tradicionales enfoques pedagógicos basados en la transmisión de conocimientos, donde se busca involucrar a los estudiantes en su propio proceso de aprendizaje, fomentando su participación y colaboración, y promoviendo el desarrollo de habilidades emocionales y sociales. En este sentido, el presente estudio se enfoca en analizar el impacto de las metodologías activas en el desarrollo de la motivación y la inteligencia emocional en estudiantes de Formación Profesional de las tecnologías emergentes más demandada por en el mundo laboral actual (electrónica, robótica, automatización e informática). Para ello, se realizó una revisión sistemática donde se seleccionaron 21 estudios obtenidos de la búsqueda en 4 bases de datos diferentes: ERIC, Dialnet, Scopus y Pubmed. Los resultados de esta revisión sistemática sugieren que el uso de metodologías activas, como el aprendizaje basado en proyectos, aprendizaje colaborativo, aprendizaje basado en problemas y aula invertida, tienen un impacto significativo en la motivación de los estudiantes, aumentando su interés y compromiso con el proceso de aprendizaje, proporcionándoles la motivación intrínseca por seguir aprendiendo a lo largo de la vida. Esto se debe, en gran medida, a que las metodologías activas fomentan el aprendizaje autónomo, la creatividad y la innovación, lo que permite a los estudiantes sentirse más implicados en su propio proceso de aprendizaje. Además, se observó que la implementación de estas metodologías también tiene un efecto positivo en el desarrollo de habilidades emocionales en los estudiantes de Formación Profesional técnica. En concreto, se encontró que estas metodologías contribuyen a mejorar la autoestima, la empatía, la resolución de conflictos y la toma de decisiones, habilidades fundamentales para el desarrollo emocional y social de los estudiantes e imprescindibles para su actuación profesional.